
Reflejan una problemática más profunda, la migración forzada por la pobreza y la falta de oportunidades en las comunidades de origen
Jhonatan González NOTICIAS

La migración de jóvenes chiapanecos en busca de empleo continúa siendo una situación alarmante que expone a este sector de la población a accidentes, explotación laboral e incluso al reclutamiento por parte del crimen organizado, advirtió el padre Gilberto Hernández García, asesor de la Pastoral Social y director de Cáritas de Tuxtla.
Tras el reciente accidente ocurrido en la carretera de cuota Chiapa de Corzo – San Cristóbal, donde se vieron involucrados jóvenes de comunidades chiapanecas, el sacerdote señaló que estos hechos reflejan una problemática más profunda: la migración forzada por la pobreza y la falta de oportunidades en las comunidades de origen.
“Chiapas es un estado expulsor de migrantes.
Muchos jóvenes salen hacia otros polos de atracción como la Riviera Maya, la Ciudad de México, el Valle de San Quintín, Jalisco o Michoacán, donde hay grandes zonas de cultivo. La pobreza y la precariedad siguen siendo el motor que los obliga a salir”, explicó.
El director de Cáritas señaló que, al combinarse la carencia de recursos con la necesidad de trasladarse, los jóvenes se enfrentan a situaciones de alto riesgo. “Salen huyendo de una situación de muerte, de pobreza extrema, y muchas veces se encuentran con la muerte en el camino o con condiciones de explotación en los lugares de destino: salarios bajos, falta de una vida digna y abuso laboral”, subrayó.
Hernández García alertó también sobre el riesgo latente de que los jóvenes migrantes sean captados por grupos delictivos. Indicó que, a nivel nacional, la juventud es un sector vulnerable ante el crimen organizado, que se aprovecha de sus necesidades económicas mediante ofertas laborales engañosas difundidas incluso a través de redes sociales.
“Les ofrecen trabajos aparentemente sencillos, bien pagados, con traslado cubierto. Ante la falta de opciones, muchos aceptan sin saber que están cayendo en manos de personas sin escrúpulos”, señaló, al recordar casos recientes de jóvenes chiapanecos rescatados en otros estados del país.
Aunque la Iglesia no cuenta con cifras precisas sobre la magnitud del problema, el sacerdote indicó que existen reportes constantes a través de casas del migrante y agentes de pastoral. En la Diócesis de San Cristóbal, explicó, se recibe información principalmente sobre mujeres víctimas de trata, pero la dinámica de engaño se repite también en el caso de los jóvenes.
Finalmente, Hernández García señaló que se ha detectado una fuerte migración interna en municipios de la zona norte del estado, particularmente en la región zoque, como Francisco León y Ocotepec, de donde salen numerosos jóvenes en busca de mejores condiciones de vida.
La Iglesia reiteró su llamado a atender las causas estructurales de la migración juvenil y a generar oportunidades que eviten que más jóvenes chiapanecos se vean obligados a abandonar sus comunidades y enfrentar riesgos que ponen en peligro su vida y su futuro.
PIE DE FOTO:
La migración de jóvenes chiapanecos en busca de empleo continúa siendo una situación alarmante.
FOTO: Jhonatan González

