
En los primeros 3 días de diciembre, es una tradición heredada de generación en generación
Ana Liz Leyte NOTICIAS

Para las y los mexicanos, el Día de la Virgen de Guadalupe es una celebración de fe, identidad y unidad; es una de las festividades católicas más importantes, y prueba de ello, son las millones de peregrinaciones que se realizan en todo el país, incluyendo las que se llevan a cabo en la entidad chiapaneca.
“Después de la pandemia vino un bajón y ahorita va subiendo, no se llega igual, pero se llega a las 900, la de Villaflores que es la mayor, son cientos y cientos de gentes que vienen a peregrinar”, indicó Gustavo Llaguno, hermano misionero de la parroquia de la virgen de Guadalupe en Tuxtla Gutiérrez.
Esta festividad simboliza la fusión de las culturas indígena y española, la esperanza y la protección maternal.
Tuxtla Gutiérrez, es la ciudad de Chiapas que concentra el mayor número de movilizaciones desde el 01 de diciembre hasta el día 12. Las y los creyentes acuden a dar gracias, demostrar su fe o para realizar alguna petición a la Virgen; tradición que incluso se hereda de generación en generación.
“Es una identidad que tenemos como pueblo mexicano y cada año, celebramos a la virgen, viene de generación en generación y esperemos que las sigan cultivando nuestros hijos”, expuso la señora Mariana Ramos, creyente católica.
Año con año, miles de personas arriban a la Iglesia de Guadalupe, ubicada en la avenida central poniente de Tuxtla Gutiérrez.
De acuerdo a los organizados, previo a la pandemia por COVID-19, se tenían contabilizadas más de mil peregrinaciones durante los primeros 12 días de diciembre, sin embargo, a partir del 2020, éstas disminuyeron, pero se espera que para este 2025, se llegue a un número similar.
“Se necesita esa fuerza espiritual de la Virgen, la respuesta es grande, la fe de la gente por buscar la fe y la bendición es maravillosa su respuesta”, dijo Gustavo Llaguno.
Piden pacificación del país y del Estado
La inseguridad y hechos violentos que actualmente se viven en estado y en país, se reflejan también en las peticiones que feligreses externan a la Virgen, pues feligreses piden pacificación y alto a la violencia.
“Pensamos incluso que iban a bajar las peregrinaciones, pero llegaron muchas más, justo por lo mismo, por la inseguridad se necesita esa fuerza espiritual de la Virgen María, protección y bendición, la respuesta es grande”, agregó Gustavo Llaguno.
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Para las y los mexicanos, el Día de la Virgen de Guadalupe es una celebración de fe, identidad y unidad.
FOTO: Ana Liz Leyte

