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La fiesta del futbol estudiantil alcanzó su punto máximo en las instalaciones de la Preparatoria Número 2, sede que albergó el cierre definitivo del Torneo Interno Médica Mavel. Ante una asistencia masiva que superó los mil espectadores, la comunidad escolar se volcó para apoyar a sus escuadras en una cartelera que desbordó adrenalina, técnica y un espíritu competitivo ejemplar. Desde las primeras horas, el graderío se convirtió en un crisol de porras y cánticos que enmarcaron la definición de los tres puestos de honor de la justa.
La actividad en el rectángulo de juego inició con el enfrentamiento por la medalla de bronce. Los conjuntos de Brazzers y Talacheros saltaron al empastado con la consigna de no guardarse nada. Fue un duelo de ida y vuelta constante, donde la paridad de fuerzas obligó a ambos cuadros a extremar precauciones defensivas. No obstante, la escuadra de Brazzers mostró mayor lucidez en el último cuarto de la cancha, logrando sentenciar un apretado 3-2 en los suspiros finales del encuentro, dejando a los espectadores al borde de la butaca hasta el silbatazo del colegiado.
Posteriormente, el protocolo dio paso a la gran Final de Copa, trofeo de plata que disputaron Los Capos frente a Halcones. En este compromiso, la historia fue distinta, pues Los Capos impusieron condiciones desde el silbatazo inicial, exhibiendo una estructura táctica impecable y una contundencia envidiable. Con un marcador inobjetable de 4-0, el equipo dominante neutralizó los embates de Halcones y se adjudicó el título con autoridad, demostrando por qué fueron uno de los cuadros más consistentes a lo largo de la fase regular del certamen.
El plato fuerte de la jornada llegó con la Gran Final por el título absoluto entre Gran Malinis y Lomecan FC. El cotejo se transformó en un duelo de estrategias individuales y colectivas, donde Santiago, por parte de Lomecan FC, y Emilio Lara, en representación de Gran Malinis, se echaron el equipo al hombro. Ambos artilleros firmaron un doblete que mantuvo la pizarra igualada 2-2 al término de los dos periodos reglamentarios. La definición tuvo que trasladarse a la tanda de penales, donde la frialdad de Gran Malinis fue clave al acertar sus tres ejecuciones, mientras que un error tempranero de Lomecan FC sentenció el 3-1 definitivo desde los once pasos, otorgando el campeonato a la escuadra de los Malinis.
PIE DE FOTO: Los integrantes de Gran Malinis festejan el título de campeones tras la tanda de penales en la cancha principal de la Preparatoria Número 2.
FOTO: CORTESÍA
