La decisión implica la pérdida del estado clerical para un diácono, un castigo severo que responde a las demandas de las asociaciones de víctimas.

El imparcial

VATICANO.- En un movimiento que reafirma su compromiso con la política de “tolerancia cero” contra la pederastia, el papa León XIV emitió su primera sanción en esta materia desde que fue elegido el pasado mes de mayo.
La decisión implica la pérdida del estado clerical para un diácono, un castigo severo que responde a las demandas de las asociaciones de víctimas, según AFP.
De acuerdo con la diócesis, el proceso canónico fue gestionado por el Dicasterio para la Doctrina de la Fe, el organismo del Vaticano encargado de este tipo de casos, que elevó la recomendación directamente al Pontífice.
Una de las penas más graves en la Iglesia
La pérdida del estado clerical es considerada una de las sanciones más duras dentro de la Iglesia católica.
Con esta medida, al diácono castigado se le prohíbe ejercer cualquier función sacerdotal, como dar sermones, oficiar misas, administrar sacramentos o impartir clases en seminarios y parroquias.
De esta forma, se le retira toda autoridad para hablar o actuar en nombre de la Iglesia.
“La violencia sufrida no puede borrarse”
El anuncio coincide con las recientes declaraciones del Papa. Durante una oración en la basílica de San Pedro, León XIV reiteró el compromiso de la Iglesia con las víctimas de abuso.
En un gesto de empatía, reconoció que “la violencia sufrida no puede borrarse”, un mensaje que busca honrar el dolor y la experiencia de los sobrevivientes.
Contexto internacional de escrutinio
La acción del Pontífice se produce en un momento de atención global sobre la pederastia clerical.
Mientras países como Francia, Estados Unidos y Alemania han realizado investigaciones nacionales de gran alcance, Italia —pese a su fuerte influencia católica— aún no ha emprendido una pesquisa de esa magnitud.
Con esta decisión, León XIV envía un mensaje contundente a nivel mundial sobre la postura de la Iglesia frente a estos delitos y la voluntad de su pontificado de enfrentarlos.
Pederastía en la iglesia
En el 2019, el papa Francisco lanzó una batería de medidas para endurecer la lucha contra la pederastía en el Vaticano y dispuso que los casos de abusos a menores y “personas vulnerables” puedan ser investigados de oficio por la justicia penal de la Santa Sede, según el portal Religión Digital.
A través de un decreto pontificio, una nueva ley penal y una guía de buenas prácticas, Jorge Bergoglio estableció la obligatoriedad de evaluar la “idoneidad” de los nuevos empleados en su trato con menores, así como la denuncia inmediata de los casos de abuso y reglas claras para el acompañamiento de las víctimas.
Ampliación de la definición de víctimas
En el texto, Francisco equiparó además los casos de abusos a menores con aquellos cometidos a “personas en estado de enfermedad, de deficiencia física o psíquica, o en situación de privación de la libertad personal que de hecho, incluso ocasionalmente, limiten su capacidad de entender, querer, o de resistir el ataque”.
El Motu Proprio publicado hoy, titulado “Sobre la protección de los menores y de las personas vulnerables”, constituye el primer paso concreto después del encuentro convocado en febrero en el Vaticano para ajustar la lucha contra la pederastía en ámbitos eclesiales.
Denuncia obligatoria y nuevas contrataciones
El decreto de seis artículos establece que los miembros de la Curia y de la Santa Sede están “obligados a presentar” a los tribunales vaticanos sus denuncias en caso de tener “noticias o motivos fundados” de abusos.
Asimismo, dispone que en las futuras contrataciones “se debe determinar la idoneidad del candidato para interactuar con menores y personas vulnerables”.
Líneas de conducta para operadores pastorales
Finalmente, se publicaron las guías para los responsables pastorales, que exigen “prudencia y respeto” en las relaciones con menores.
Entre sus prohibiciones más estrictas se incluyen: “infringir castigos corporales de cualquier tipo”; “establecer un vínculo preferencial con un menor singular”; “pedir a un menor que guarde un secreto”; y “fotografiarlos o filmarlos” sin el consentimiento escrito de sus padres o tutores.

PIE DE FOTO:
El papa León XIV emitió su primera sanción en esta materia desde que fue elegido el pasado mes de mayo.
foto: El Imparcial